¿Qué es la normativa RGPD?

Estas siglas, que hacen referencia al Reglamento General de Protección de Datos, nos suenan desde el año 2016, cuando este fue aprobado por la Unión Europea. Eso sí, no comenzó a aplicarse hasta finales del mes de mayo de 2018.

Se trata de la legislación vigente sobre protección de datos ante la que las empresas deben responder en caso de la vulneración de los datos de terceros que estas manejan. ¿Su objetivo? Garantizar tanto la seguridad como la privacidad de los datos de los usuarios de servicios digitales, y por eso resulta tan importante contar con un seguro de Protección de Datos como el de Caser, que adecuará los sistemas informáticos de tu empresa a la normativa vigente.

Los ataques informáticos cada vez son más frecuentes y más sofisticados. Cada vez que una empresa tiene una fuga de datos masiva aparece en los noticieros de todo el continente y se arriesga a tener que hacer frente a indemnizaciones millonarias.

El seguro de ciberprotección de Caser no solo te cubre en este tipo de supuestos, sino que incluye coberturas opcionales de asistencia informática que te permitirán anticiparte a ellos. ¿Qué cobertura te ofrece nuestro seguro de ciberprotección?

• Análisis y corrección de vulnerabilidades (análisis del sistema informático, informes de estado, etc.).
• Adaptación de tu empresa al Reglamento (UE) 2016/67 o normativa de RGPD (garantía de protección de datos, responsabilidad civil, gastos de defensa en juicios y fianzas civiles).
• Asistencia tecnológica.
• Vigilancia digital.
• Instalación de una aplicación antisecuestro.

Tal y como ya hemos comentado un poco más arriba y como ya se publicó en su día en el BOE, la normativa RGPD es una normativa a nivel europeo. Esto hace que se aplique sobre todas aquellas empresas, entidades públicas o profesionales que operen dentro de alguno de los 28 países de la Unión Europea. Pero la cosa no queda ahí.

Las sanciones en el RGPD también afectan a las empresas de fuera de la UE que procesen datos de ciudadanos comunitarios. Vamos, que toda aquella persona que cumplimente un proceso de registro y/o compra y que sea europea debe estar protegida por las medidas recogidas en este texto legal.

• El artículo 5 de esta ley, por ejemplo, recoge que los datos deben ser recolectados con fines legítimos, determinados y explícitos, así como que deben tratarse de forma leal, lícita y transparente.

Una de las grandes dudas que llegan con una nueva ley es si suple o complementa a la anterior, en este caso la normativa LOPD (la Ley Orgánica de Protección de Datos). En este caso, lo cierto es que la LOPD como tal no sigue vigente, sino que ha evolucionado en la LOPDGDD o Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales.

Estaba claro que, con lo que ha cambiado el mundo, la forma de acceder a los datos y todo lo que se puede hacer con ellos a día de hoy, no podíamos seguir rigiéndonos por una legislación obsoleta en este sentido.

En este sentido, la LOPDGDD sigue compartiendo algunos puntos con su antecesora:

• Deber de comunicar problemas de seguridad
• Respeto absoluto de la confidencialidad
• Registrar los tratamientos realizados en la empresa
• Analizar todos los riesgos que surjan o puedan surgir

Eso sí, también se han implementado otros que, a buen seguro, te sonarán bastante:

• Derecho al olvido, tanto en internet en general como en las redes sociales en particular
• Derecho a acceder a internet como bien de primera necesidad
• Derecho a la desconexión digital fuera del horario laboral
• Derecho a la educación y la protección de los menores en la red de redes

Sí, sabemos que todo esto es complicado, y que parece absolutamente inabarcable. Sin embargo, con un poco de ayuda experta y una protección a la altura, gestionarlo no es ningún problema.