¿Qué es un arrendatario?

Es habitual confundirse entre arrendadores y arrendatarios, pero lo cierto es que basta con fijarse en las obligaciones del arrendatario para descubrir la diferencia. Se llama arrendatario a la persona, ya sea física o jurídica, que adquiere el derecho a disfrutar un activo que no le pertenece a cambio de un alquiler. Este acuerdo de explotación y/o disfrute debe estar refrendado por un contrato de arrendamiento en el que se indiquen la cuantía a pagar, el tiempo durante el que se hará y bajo qué condiciones.

En dicho contrato se establecen los derechos y obligaciones de cada parte y, en el caso del arrendatario, el pago de una renta o alquiler le da derecho a usar el inmueble pero con la obligación de devolverlo en la fecha pactada y en las mismas condiciones óptimas en las que se le entrega.

El arrendatario no puede modificar o destruir el inmueble y tiene que hacerse responsable, por lo general, de los gastos que se originen en la vivienda.

Caser ofrece un seguro para inquilinos que protege a esas personas que viven de alquiler. Independientemente de que el arrendador tenga un seguro de hogar, tú como arrendatario puedes necesitar una protección extra con otras coberturas más específicas, ya que, al vivir en una vivienda que no es de tu propiedad, te expones a ciertos riesgos.

Puedes causar daños a la vivienda o a un vecino e incluso a un tercero, y Caser ha pensado en ello. Además, protegemos tus pertenencias, de las que ni el propietario ni su seguro de hogar se harán responsables.

Estamos preparados para cubrir cualquier imprevisto en la vivienda en la que resides y también en caso de que te echen de casa, tengas problemas con el casero o te veas obligado a cambiar de casa de alquiler. Nuestro completo seguro para inquilinos te ayuda a despreocuparse hasta de las cuestiones del día a día.