Solo el 8% tiene contratado algún producto para ahorrar de cara a la jubilación, siendo los que más tienen contratados los autónomos sin empleados (25%).
Como hemos contado aquí ya en anteriores ocasiones, los Planes de Pensiones de Empleo (PPE) y Planes de Pensiones de Empleo Simplificados (PPES) son instrumentos de ahorro-previsión a largo plazo que, a diferencia de los planes de pensiones individuales, son promovidos por las empresas o instituciones para sus trabajadores. El principal objetivo es complementar la pensión pública de jubilación a percibir por la Seguridad Social.
Precisamente la última edición del estudio del Observatorio Caser ha buscado obtener información sobre el grado de conocimiento que existe sobre este tipo de instrumentos de ahorro colectivo entre las asociaciones y colegios profesionales y el tejido empresarial español.
Entre los resultados de este trabajo destaca que al ser preguntados sobre si tienen contratado algún producto o servicio para ayudarles a ahorrar de cara a su jubilación, solo un 8% de las empresas y autónomos efectivamente tiene contratado alguno, lo que supone un 5% menos respecto al año anterior. Sin embargo, hay una buena noticia ya que son los autónomos sin empleados los que más tienen contratados estos productos, con un 25% que así lo asegura.
Otro de los datos más destacados de la encuesta es que el porcentaje de empleados que ha preguntado a su empresa si dispone de algún producto o servicio de este tipo para ahorrar para la jubilación es muy bajo, apenas un 3% se ha mostrado interesado en esta posibilidad.
Del mismo modo, solo un 6% de las Asociaciones o Colegios profesionales reconoce haber recibido preguntas sobre si disponen de algún producto de este tipo para ayudar a ahorrar de cara a la jubilación por parte de los empleados, aunque se encuentra tres puntos por encima de la media de todos los encuestados.
Esto indica que todavía existe un desconocimiento generalizado entre los trabajadores sobre los beneficios de los Planes de Pensiones de Empleo.
A la hora de ser preguntados sobre qué características creen que son necesarias para fomentar su promoción, las asociaciones y colegios profesionales creen que habría que impulsar los beneficios fiscales que conllevan (8%), aumentar la rentabilidad o los incentivos que ofrecen (7%), que sean productos de seguridad y confianza (6%) y que la cantidad de inversión no tenga un mínimo ni máximo desgravable (4%).
De hecho, para aquellas asociaciones y colegios que ya los promueven, los principales motivos que los llevaron a hacerlo son el hecho de ser eficientes con sus asociados y darles alternativas (60%), complementar la pensión de jubilación de la Seguridad Social (40%) y obtener beneficios fiscales y deducciones (40%).
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